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La importancia del calibrado en las encuestas de hogares

09-06-15

María de Blas y Carlos Pérez, de la Unidad de Muestreo de Encuestas de Hogares

El pasado 26 de Mayo se desarrolló en la sede del INE el curso “Técnicas de calibrado dirigidas a encuestas de hogares”. Sus ponentes forman parte de la Unidad de Muestreo de Encuestas de Hogares: Carlos Pérez Arriero, jefe de área, y María de Blas Portero, directora de programa.

En la primera parte del curso, Carlos Pérez revisó la evolución histórica de las diferentes técnicas de reponderación, y dio a conocer una perspectiva general del estado actual de la situación en lo que se refiere a las técnicas de calibrado en el ámbito de las encuestas de hogares en las oficinas de estadística.

En este apartado se presentó un estudio detallado de la metodología subyacente en el programa informático CALMAR, que es uno de los más utilizados para llevar a cabo este tipo de reponderaciones, tanto por su facilidad de funcionamiento, como por la solidez teórica de los métodos en los que se sustenta.

La segunda parte del curso fue de tipo práctico. En ella, María de Blas explicó la forma de utilizar el programa CALMAR. En particular, mostró con detalle la manera de incorporar los datos recogidos en las encuestas y la información auxiliar disponible, los parámetros que hay que considerar y cómo se deciden sus valores, y cuál es la salida que proporciona el programa y cómo hay que interpretarla.

Por último, se refirieron a otros programas que realizan un proceso similar de calibrado pero que están escritos en otros lenguajes informáticos. Entre ellos Bascula, desarrollado por el Instituto estadístico de Países Bajos, g-CALIB-S del Instituto estadístico de Bélgica, y GES realizado por la Oficina de Estadística de Canadá.

Fuentes externas

En la estadística oficial, es habitual la utilización de información auxiliar procedente de fuentes externas, con el objetivo de mejorar la precisión de las estimaciones y en particular de corregir los posibles sesgos derivados de la falta de respuesta.

Prácticamente desde su creación, las oficinas de estadística han utilizado estimadores de razón en las encuestas de hogares para incorporar la información auxiliar disponible al proceso de estimación.

Este tipo de estimadores, que tienen una formulación sencilla, práctica e intuitiva, se puede incluir dentro de la familia de los estimadores calibrados, pues ajustan las estimaciones a los totales de una variable auxiliar. En la práctica esta variable ha sido durante un cierto tiempo el total poblacional por estrato en la fecha de referencia de la encuesta.

Métodos más avanzados

Con el paso del tiempo y gracias a la mejora de los procesos informáticos, al control de los registros administrativos y, en general, a la mayor capacidad técnica de las diferentes organizaciones, se dispone de una mayor variedad de fuentes externas fiables, actualizadas, y relacionadas con las variables objetivo de las encuestas.

Este hecho ha permitido el desarrollo y puesta en práctica de técnicas de estimación más complejas, que son capaces de incorporar información auxiliar multivariante y más desagregada. Todo ello con el fin de mejorar la calidad de las estimaciones obtenidas y además, como garantía de coherencia de la información publicada.

Entre las fuentes auxiliares habitualmente utilizadas en las encuestas de hogares, se encuentran, al nivel de comunidad autónoma, la población por grupos quinquenales de edad y sexo, la población por nacionalidad y los hogares por tamaño. Y es de esperar que a medio plazo se pueda contar con bastante más información adicional procedente de otras fuentes.

El calibrado como metodología, se viene utilizando en todas las encuestas de hogares y operaciones estadísticas relativas a la población, desde comienzos del presente siglo. Y  con toda seguridad su presencia va a ser cada vez mayor, conforme vaya aumentando la calidad y cantidad de la información auxiliar susceptible de ser utilizada en la mejora de la producción estadística.