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Elena Manzanera: “La digitalización nos obliga a investigar nuevas fuentes, a afrontar nuevas necesidades de información y a nuevos procesos”

14-09-22

Elena Manzanera, durante la entrevista

Elena Manzanera Díaz preside el Instituto Nacional de Estadística (INE) desde primeros de agosto. Licenciada en ciencia económica por la Universidad de Sevilla afirma que siempre ha estado atraída por la econometría y el análisis económico.

El mismo año que terminó la carrera se creó el Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía (IECA) y, cosas del destino, le surgió la oportunidad de empezar a trabajar allí, en su Sevilla natal.

Nunca se había planteado presidir el INE, pero reconoce que cuando se lo propusieron empezó a ver “esa parte positiva que supone tener un reto por delante” y pensó que podría desarrollarlo. “Vi que mi experiencia y mi bagaje en el ámbito de la estadística pública me podía servir, pensé que podría contribuir y acepté el reto”, señala.

Su dedicación a la estadística no le viene de familia. Y aunque uno de sus cuatro hijos es economista, y también con orientación econométrica, “por ahora no tiene su objetivo puesto en la estadística pública”.

Le gusta viajar y cita a Gabriel García Márquez como uno de sus autores preferidos: “me he leído casi toda su obra”. Afirma tener poco tiempo libre para otras aficiones y prefiere no confesar su preferencia futbolística, seguramente para no incomodar a algunos de sus hijos, que rivalizan como seguidores del Betis y del Sevilla.

Es una persona cercana, amable y se autodefine como muy familiar. Afirma que procura cultivar las relaciones personales. Y se le da bien, porque genera confianza durante la conversación.

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P – ¿Qué supone para usted presidir un organismo como el INE?

R - He desarrollado toda mi carrera profesional en el ámbito de la estadística pública en Andalucía, y el INE siempre ha sido un referente. Estar ahora en esta situación y tener la oportunidad de desarrollar esta tarea me supone una satisfacción. Y también un reto personal y profesional.

P- ¿A qué retos se enfrenta a corto y medio plazo la estadística en general y el INE en particular?

R - Los retos a los que se enfrenta la estadística oficial y el INE no son diferentes de los que se enfrenta la sociedad en general y tienen que ver con un proceso creciente de digitalización. 

Desde el punto de vista de la estadística, este proceso nos obliga a investigar nuevas fuentes de información, a afrontar nuevas necesidades de información y a realizar nuevos procesos para generar los datos que demanda la sociedad.

P - Y en ese proceso, qué papel le gustaría que jugara el INE  

R – El INE debe tener un papel central en este proceso ya que es la institución donde reside el conocimiento en torno a los datos que tiene la administración.

La estadística surge como una actividad pegada al ejercicio de gobierno, para dar soporte a la toma de decisiones. Y en este mundo de datos el papel del INE tiene que ser muy central, tanto desde el punto de vista de la información que ofrece para poder tomar decisiones en cualquier ámbito, como para ser también un motor de innovación en el ámbito de los datos y de su tratamiento.

P – Esta transformación digital también afecta al perfil del estadístico. ¿Cómo va a afrontar el INE este desafío para su plantilla?  

R - El perfil del estadístico puede que esté cambiando, pero en el fondo lo que necesitamos son buenos estadísticos que sepan enfrentarse a los desafíos que plantea la digitalización. Para ello tenemos que disponer de un buen programa de formación para nuestros estadísticos que permita afrontar estos retos.

De cara a la incorporación de nuevos funcionarios, en la convocatoria actual de oposiciones del INE se han añadido nuevas especialidades que van a permitir una incorporación directa de personal con ese nuevo perfil de científico de datos que este momento más se demanda.

P - ¿Cómo se puede avanzar en la coordinación y cooperación entre el INE y el resto de los productores nacionales de estadísticas?

R - La coordinación es muy necesaria entre el INE y el resto de las oficinas que elaboran estadísticas oficiales en otros ámbitos, como pueden ser las comunidades autónomas o incluso en el ámbito local.

Los productores de estadísticas tenemos muchos puntos en común, muchas cuestiones en las que podemos trabajar de manera colaborativa y afrontar retos comunes. Creo que ganaríamos mucho si lo hacemos de manera conjunta.

En el ámbito de la Administración General del Estado el INE también tiene que adoptar un papel de ofrecer al resto de departamentos esa capacidad que tienen los datos para diseñar y tomar decisiones basadas en evidencias.

P - ¿Cómo analiza el impacto de la crisis sanitaria en las organizaciones estadísticas? ¿Qué lecciones se han aprendido?

R – La pandemia ha tenido un impacto negativo en la sociedad. Pero en el ámbito de las organizaciones estadísticas ha supuesto una oportunidad.

Esta crisis sanitaria ha puesto de manifiesto varios aspectos: uno de ellos es la importancia de los datos para tomar decisiones. Pero, además, la importancia de que esos datos sean de una determinada manera, que tengan más frecuencia de la que tenían, que tengan un menor desfase y que se difundan con mayor detalle. Todo esto ha hecho que el INE ponga en marcha estadísticas experimentales para dar respuesta a estas nuevas necesidades de información. En este sentido, la crisis ha sido un acicate para innovar.

El segundo aspecto es que se ha producido un salto cualitativo en la digitalización y en la manera en que podemos abordar los procesos desde el ámbito de la producción estadística, que a su vez nos ha llevado a innovar en la manera de hacer las cosas.

Y por añadir un tercer aspecto, creo que ha puesto en valor también en la ciudadanía el importante papel de los datos. Y eso para una organización estadística es muy relevante.

P - ¿Qué estrategias debe desarrollar el INE para seguir ofreciendo información estadística de calidad y datos que generen confianza entre la sociedad?

R - Hay que partir de la base de que la estadística es un bien público, un servicio público necesario para la sociedad, y eso nos obliga a que estemos en un proceso de mejora continua mediante la incorporación de nuevos procesos y nuevas fuentes. Todo ello orientado a la mejora de la calidad de lo que hacemos, a la mejora de la eficiencia en la manera que tenemos de hacer las cosas y a mantener con ello el nivel de calidad y confianza que tienen las estadísticas del INE.

De cara a los usuarios, el reto que tenemos que afrontar es ser capaces de adaptarnos a sus nuevas necesidades de información, y que tienen que ver con ese mayor detalle, con esa mayor granularidad, con ese menor desfase y con esa inmediatez que ahora se necesita. Nos estamos acostumbrando a tener muchos datos a partir de este proceso de digitalización y a llevar un móvil en la mano que es capaz de dar respuesta inmediata a una pregunta. Ese es un reto al que tenemos que enfrentarnos y dar respuesta. 

P- Para finalizar, qué mensaje le gustaría enviar al personal del INE  

R - Les diría que vengo con muchas ganas de trabajar y con muchas ganas de que, entre todos, seamos capaces de seguir haciendo al INE mejor cada día y de que lo posicionemos entre todos en el lugar que debe tener en este mundo del dato.

En el plano más personal espero que en esta etapa el INE sea un buen lugar de trabajo en el que la gente esté cómoda y contenta, porque estoy convencida de que ello contribuirá a que seamos mejores.